Elegir nombre de dominio

Elegir el nombre de un dominio es una de las decisiones más importantes que vas a tomar en la creación de una web. Por eso, aquí vamos a ver cómo escoger bien el nombre de tu dominio.

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De todos modos, que no cunda el pánico: si al cabo de un tiempo te arrepientes de tu elección tampoco se acaba el mundo. Técnicamente no es complicado cambiar un dominio por otro y comercialmente tampoco es un drama si no ha pasado ya mucho tiempo.

Veamos entonces los criterios y el proceso para elegir un buen nombre de dominio:

¿Dónde y cómo comprar un nombre de dominio?

Empecemos por el principio: ¿dónde puedes adquirir un dominio y cómo se hace?

La adquisición de un dominio es un proceso totalmente online, lo puedes hacer en unos pocos minutos a través de un proveedor de dominios. Los proveedores de dominios suelen ofrecer, además, servicios como hosting web y/o email corporativo.

Entre los proveedores de dominios no hay grandes diferencias de calidad de servicio. Sin embargo, los precios de los diferentes proveedores son muy dispares.

Ojo, porque hay muchas ofertas agresivas engañosas. Por ejemplo: la de 0,99€ de GoDaddy.

Eso es el precio para el primer año, pero luego te “comes” al año siguiente 19,99€ + IVA de renovación, que son más de 24€ por año. Encima, estamos hablando de un proveedor con una pésima reputación.

La mejor oferta que he encontrado es la de Ionos, con 1€ el primer año pero, sobre todo, por el buenísimo precio de renovación anual. Descúbrelo tú mismo y sorpréndete. 😉

Y, si contratas hosting y dominio juntos, en los hostings que recomiendo aquí vas a encontrar precios razonables, solamente SiteGround se va un poco con sus 15,99€ por año.

Aquí puedes ver todo el proceso de compra, junto con la creación de una web profesional en WordPress prácticamente gratis:

Namecheap sigue un proveedor con precios bastante razonables, pero su interfaz sólo está disponible en inglés. Si eso no es un inconveniente para ti, también es una opción que está bien. Por otra parte, como hosting no te los recomiendo, son un servicio de hosting regular.

Cómo elegir el nombre de tu dominio

Ahora que sabes dónde adquirir un dominio, veamos qué criterios deberías tener en cuenta para elegir un buen nombre:

¿Quieres expresar la temática con tu marca?

La mayoría de las marcas son totalmente agnósticas al tipo de productos o servicios que venden. Por ejemplo, si no supieras ya que “Alfa Romeo” es una marca de coches, sería muy difícil que lo adivinases sólo por el nombre.

Sin embargo, a veces, las marcas se idean para expresar la actividad que hay detrás de ellas.

Por ejemplo: esta web, “WordPress a Tope”, deja muy claro cuál es la temática de la que se va a hablar en esta web: todo lo que tenga que ver con WordPress.

Se podría haber ido incluso más allá haciendo que el nombre de marca sugiriese de alguna manera que es fundamentalmente un sitio de formación, no de venta de productos o servicios.

Pero, por otra parte, preferimos también dejarlo abierto en este sentido porque no está nada claro que a medio plazo esta web se vaya a ser únicamente de formación y divulgación.

Así que este tema es un arma de doble filo: puede estar muy bien para que desde el primer momento la gente que no conoce tu marca se interese más por ella. Ayuda a identificar a qué se dedica tu marca y esto te ayudará a crecer un poco más rápido. Pero en la misma medida también puede atarte más con respecto a por dónde la quieres llevar en un futuro.

La decisión depende entonces de las perspectivas para la evolución de tu proyecto y de tus gustos personales de cómo percibes uno u otro estilo de marca.

¿Un dominio de marca o un dominio de palabras clave?

El dominio de tu web puede representar un nombre marca (existente o que quieras crear con este proyecto) o lo puedes orientar a una necesidad muy concreta para la cual hay una gran demanda.

Vuelvo al ejemplo de nuestra propia web, “WordPress a Tope”. Su dominio es wpatope.com, un dominio de marca en el cuál no hay ningún tipo de palabra clave (palabras usadas en los buscadores).

Por el contrario, un buen ejemplo de dominio de palabras clave sería, por ejemplo, neumaticosbaratos.com. Esto tiene sentido cuando tu web se orienta a un nicho de demanda muy concreto, por eso, este tipo de webs se llaman también webs o sitios de nicho.

En su momento, además, tenían una cierta ventaja en el posicionamiento web. En el ejemplo anterior, si alguien buscaba “neumáticos baratos”, “comprar neumáticos baratos” o similares, el dominio tendría un plus de fuerza importante para estar arriba en los resultados.

Pero, según Google, esto hoy en día ya no es así.

No obstante, sí que puede ser que des con un nombre tipo palabras clave que te guste y encaje perfecto con tu proyecto. Así que ésta sí que puede ser una buena razón para usarlo.

¿Un dominio de marca personal o de marca comercial?

Si no tiras por un dominio para un sitio de nicho, sino un nombre para tu marca, de nuevo hay dos posibilidades que debes meditar: una marca personal o una marca comercial.

Un dominio de marca personal es básicamente usar tu nombre como dominio, por ejemplo: bertolopez.com, como ya vimos antes, una marca comercial sería la de esta web, por ejemplo.

Esto será en gran medida una cuestión de estrategia y de preferencias personales donde hay que meditar también bien las implicaciones de una u otra opción.

Por ejemplo: si con el tiempo consigues un negocio rentable y te interesa deshacerte con él, con una marca personal, según lo que vayas a hacer, puede ser más complicado porque tu persona esta tan ligada a la marca que, sin ti, la marca deje de tener sentido.

Pero también aquí depende del caso concreto: no sería lo mismo si martarodriguez.com es la marca de una abogada freelance que si lo es de una tienda de vinos online.

Otros aspectos del nombre para tener en cuenta

Por último, procura que el nombre de dominio sea lo más claro, fácil de escribir y recordar posible.

Esto quiere decir, por ejemplo, que evites caracteres que puedan generar confusión en el dominio como números o guiones.

Este error lo cometí precisamente con esta web, Ciudadano 2.0, donde el dominio de esta web es ciudadano2cero.com.

Era consciente del problema, pero el nombre de la marca me gustaba bastante, no encontré una alternativa satisfactoria a ese nombre de marca y tampoco encontré una mejor manera de trasladar ese nombre de marca al dominio.

Total, “acepté pulpo” y tiré para adelante. Y esto no impidió que Ciudadano 2.0 se haya convertido en un sitio de referencia en su nicho.

Es decir, trata de seguir los consejos, pero no te agobies si no los puedes llevar a cabo al pie de la letra en tu caso. Esto tampoco significa que estés condenado al fracaso como has podido ver con mi ejemplo. Además, no es nada fácil encontrar un nombre de dominio “ideal” que esté libre.

Aspectos legales de un nombre de dominio

Una vez que tengas una primera idea o ideas para nombres de dominio, ten en cuenta que estamos hablando de un nombre que puede haber sido registrado ya como propiedad industrial y estar protegido frente a usos ilegítimos.

Es raro que un nombre de marca protegido no tenga registrado también el dominio correspondiente en las principales extensiones, pero puede pasar.

Pero es que, además, puede estar protegido de modo parcial. Mismamente este sitio web, que se dedica a WordPress, tenía este problema ya que la empresa detrás de WordPress, Automattic, advierte expresamente de que no se use esta marca registrada en nombres de dominio.

Es decir, si nuestro dominio fuese wordpressatope.com, podríamos tener un problema con ellos.

Por suerte, está ya tan reconocida la abreviación de “wp” que wpatope.com sigue siendo un nombre de dominio reconocible para nuestro público y corto, que siempre es bueno.

Además, desde Automattic animan expresamente a utilizar “wp” para sitios relacionados con WordPress, así que en nuestro caso, al final, pudimos cuadrar las cosas bastante bien.

Qué extensión te conviene usar para tu dominio

Hechas las consideraciones sobre el nombre como tal, veamos ahora el tema de las extensiones, es decir, si usar un dominio .com, .es, .org, .net, etc.

De nuevo, de esto se puede hablar mucho, pero aquí te lo voy a simplificar:

• En términos generales, la opción preferible sigue siendo el “.com”. Simplemente por cultura: es la extensión más “típica”, junto con el “.es”, si teclea tu marca en el navegador la usarán por defecto, etc. El inconveniente es que también será la más difícil para encontrar dominios aún disponibles.
• El “.es” es una buena alternativa si vas a centrar tu actividad claramente en España. El razonamiento es similar para otros países, por ejemplo, en el caso de Mexico, “.mx”. Además, te puede proporcionar una pequeña ventaja en Google para ese país.
• Luego tienes un amplio elenco de otras opciones: las clásicas “.org” y “.net” y un sinfín de extensiones genéricas (no de países concretos) que se ha ido añadiendo. De todos modos, si el nombre ya está usándose como dominio “.com” o “.es” no es una buena idea que tú lo uses con otra extensión.

Herramientas para encontrar nombres de dominio

Como ya he comentado, los nombres de dominio más o menos “evidentes” están ya prácticamente todos cogidos, así que vas a tener que echarle cierta creatividad para dar con un nombre para tu marca que sea bueno y para el que se pueda encontrar un dominio adecuado.

Los propios proveedores ya suelen incorporar hoy en día herramientas que te ayudan a explorar nombres de dominios disponibles, pero éstas suelen ser muy simplonas. Por eso, conviene conocer algunas herramientas algo mejores que te puede ayudar en esa exploración de nombres.

Lo malo es que estas herramientas están todas muy orientadas al inglés. Para nombres en castellanos, los resultados son regulares… Pero en cualquier caso, merece la pena ponerte aquí dos ejemplos de las más populares:

Domainwheel

Domainwheel es una herramienta que presume de aplicar inteligencia artificial para generar propuestas de nombres de dominio disponibles.

Puedes introducir varias palabras y la herramienta te genera sugerencias tomando estas palabras como base. También puedes ver sugerencias por sectores concretos con los botones que están justo por debajo del campo en el que introduces las palabras.

Bust a Name

Bust a Name es una herramienta algo “añeja” pero que sigue siendo muy popular.

Ésta es una herramienta muy sencilla que simplemente te va a generar las combinaciones de diversas palabras que introduzcas en una lista.

Existen más herramientas que éstas, pero son todas muy parecidas a una de estas dos opciones. No creo que ganes demasiado dedicando tiempo a ir más allá de estas dos.

Cómo comprar nombres de dominio ya registrados

Y, por último, voy a cerrar con un tema que te puede resultar muy interesante según sea tu situación: comprar un dominio que ya fue registrado.

No me refiero tanto a dominios de una web que está operativa, sino a dominios que están registrados pero para los cuales aún no se ha creado una web, que se han comprado para venderlos o de webs que han sido abandonadas pero cuyo dominio no se ha dejado libre.

1. Averigua y contacta al propietario del dominio

Si hay una web activa bajo el dominio que te interesa, lo normal es que tengas vías fáciles para contactar como, por ejemplo, un formulario de contacto.

Sin embargo, en este caso, salvo que te interese comprar la web completa, será difícil un trato para que te vendan sólo su dominio en condiciones económicas interesantes. Lo normal es que tus opciones se limiten a dominios sin web activa.

Por suerte, existe la obligación legal de tener publicada la información del titular para todo dominio y es fácil averiguarla gracias al servicio de WHOIS que existe desde los comienzos de Internet.

Aunque sí puede haber una pequeña complicación adicional: que el propietario del dominio haya elegido la opción de privacidad (para evitar spam, etc.), en cuyo caso, verás a una entidad intermediaria (normalmente su proveedor de dominios) que figura como contacto público.

En este caso dirígete igualmente a esos datos de contacto, deberían contactar al propietario por ti.

Si el propietario está interesado en contactar, lo normal es que te suministren, al menos, el email del propietario y ya puedes poner en contacto.

2. Negocia una buena oferta

Ahora toca la negociación. Como bien sabrás, la negociación es un arte y si no es un terreno en el que estés algo preparado, lo más seguro es que te lleves un mal trato. Si es tu caso, mi consejo es que te prepares un poco antes con unas buenas lecturas sobre estrategias de negociación.

Como siempre, tenemos la suerte de que tienes a un clic una infinidad de material que probablemente no te convierta en un mega-crack, pero que si te sacará del “nivel pardillo”.

3. Transfiere el dominio a tu propiedad

Una vez acordado el precio, ya está todo listo para la transacción. Como muy probablemente el vendedor sea una persona desconocida, mi consejo es la prudencia: protégete contra posibles estafas.

Para esto, una buena fórmula es utilizar un tercero. Existen plataformas y agentes especializados en la compraventa de dominios que pueden serte útiles a estos efectos. En este artículo tienes un poco más de información sobre este tema.

Y esto es todo. Ahora ya sólo queda poner en marcha tu nueva web y para eso te sugiero continuar la lectura de este post con el que viene a continuación 😊

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